Contra el impuesto de morosidad

La candidata a la alcaldía El PSPV-PSOE de la Vall d’Uixó, Antonia García, apuesta por la innovación en la gestión, la austeridad, la eficiencia, la eficacia y la economía. Cinco aspectos que contrastan con el estado actual de la hacienda local del Partido Popular, que, al parecer, "está pagando a los proveedores a más de 15, 20 ó 24 meses". Una situación que García ha calificado como "impuesto de morosidad". La alcaldesa, Isabel Bonig, "se ha sacado de la manga este tributo para continuar expoliando el bolsillo de los ciudadanos y ciudadanas, que son los que están soportando el coste financiero de las arcas municipales y los que están atados de pies y manos, sometidos a la presión del chantaje para poder cobrar sus deudas", ha explicado la alcaldable.

Una situación que, ha continuado, "es idéntica a la que están viviendo las diferentes asociaciones del municipio, que no saben cuándo cobrarán si quiera la parte que todavía se les adeuda de 2010 y, por supuesto, están preocupadas".

García ha remarcado que su partido "no prometerá nada que no vaya a poder cumplir" aunque ha subrayado que "mejorar la gestión económica es una prioridad, una línea de trabajo que se va emprender desde el primer día que se obtenga la responsablidad de gobierno porque, sobre todo, somos capaces de gestionar de forma adecuada para posibiltar el pago de la deuda y generar liquidez, que también es generar empleo".

García opina que no se puede "presumir de un superávit de 955.000 euros cuando no se destina ni un euro a la creación ni cuando se deben tantos miles de euros a pequeñas y medianas empresas locales, que son las que están soportando el peso de la situación económica para beneficio de un ayuntamiento que promueve el impago".

Por todo ello, las propuestas de Antonia García pasan por " ajustar el gasto anual del ayuntamiento de manera que las consignaciones presupuestarias sean suficientes para cubrir el gasto del ejercicio más una parte del gasto pendiente de pago a proveedores de ejercicios anteriores; reducir de manera significativa los gastos de atenciones protocolarias, publicidad y propaganda; estableceremos el seguimiento de las reclamaciones y quejas ciudadanas; e impulsar medidas para garantizar la transparencia en la gestión".

"Estas son -ha añadido- una de las pinceladas que recoge el programa electoral que ya estarán recibiendo en sus casas. Nosotros, nuestro equipo, estamos comprometidos con la ciudadanía y ofrecemos más que palabras. Escuchamos, atendemos y damos respuesta a las quejas con eficacia y eficiencia. Lo hemos hecho siempre y lo continuaremos haciendo desde la responsabilidad de gobierno".